Proyectos de arquitectura humanizada, centrada en el usuario final
Trabajamos en los campos de la arquitectura, el diseño de interior y el urbanismo.
Creemos en una arquitectura humanizada que ponga el foco en el usuario final, en la sostenibilidad en su sentido más amplio: social, económica, cultural y medioambiental y en la innovación y diversidad sin perder de vista la tradición.
Creación desde el contexto y co-creación con el cliente
Creamos desde el contexto, ya sea un contexto urbano o en el entorno natural, buscando la integración de nuestros proyectos.
Partiendo de un lugar y un programa específico, co-creamos nuestros proyectos en dialogo con el cliente, los usuarios, colaboradores y stakeholders, así, garantizamos desde un principio que el proyecto nace en conexión con el contexto y las personas implicadas.
Huimos de la creación de iconos egocéntricos y descontextualizados.
Enfoque sostenible y colaboración en equipo
Vivimos en un mundo de recursos limitados. La rehabilitación está en el centro de nuestro trabajo dando una segunda vida a edificios y espacios obsoletos.
No podemos hacerlo solos, por ello, enfocamos los proyectos con humildad, involucrando desde el principio a todos los miembros del equipo, colaboradores y clientes.
Siempre hay algo que aprender y colaborando se consigue el mejor resultado final.
Desde el diseño conceptual hasta la construcción: las fases del proyecto
El proyecto arquitectónico comienza con la fase de Diseño Conceptual, donde se establece el programa, se interpretan las normativas y se realiza un análisis, junto con planos, perspectivas 3D, infografías y una lista inicial de materiales.
La siguiente fase es el Diseño Esquemático, donde los bocetos iniciales se detallan en un conjunto completo de dibujos de diseño y se lleva a cabo una nueva revisión de la normativa. Es al final de esta última fase cuando se realiza la solicitud de licencia del proyecto en el ayuntamiento correspondiente.
Se avanza a la fase de Diseño de Detalle, que incluye los documentos de construcción, las licitaciones y negociaciones. Se producen los detalles técnicos y un presupuesto final de cantidades.
La fase final, Administración de la Construcción, implica visitas regulares a la obra para asegurar que el proyecto se construya según el diseño planteado y para resolver cualquier duda con la empresa constructora, y así mantener el cronograma.
