La nueva distribución de la cota 13.35 del Hotel Chamartín expande el concepto “Plaza Mayor” en su interior.
Buscamos una tipología de planta abierta y dinámica, capaz de adaptarse a todas las necesidades funcionales y asumir la simultaneidad de las diferentes actividades y exigencias de los usuarios. Encapsulamos individualmente el catálogo de situaciones programáticas y usamos estas cajas como estrategia generadora de un espacio sin particiones. Ahora el acceso, el bar, la terraza o el mirador rompen límites estáticos y, a la vez, introducen la ciudad en nuestra plaza.
Las cajas cerradas se apoyan en la fachada y tienen un alto grado de privacidad. Son los salones y, en la fachada interior, el comedor privado. Las cajas abiertas (peceras de cristal) se relacionan con los espacios verdes, reflejando e introduciendo luz natural y vegetación en la plaza. La caja central de bordes erosionados es el check-in, la información, el acceso. El Bar cuenta con su propia caja para la cava, cerrada y discreta.
La topografía superior crea cotas elevadas al quitar el falso techo y reorganizar el paso de conductos. La altura crece en las áreas de más movimiento y flujo del usuario. Encontrando el punto máximo en el bar y la bóveda sobre la terraza de entrada. En los salones, esta altura máxima queda desdibujada e identificable por las cúpulas de luz que difuminan el techo y suavizan el ambiente.