COLEGIO MONTESIÓN
Reimaginando la educación con un nuevo complejo que favorece el trabajo en equipo y el aprendizaje compartido
Un nuevo espacio educativo que inspira el aprendizaje en un entorno flexible y acogedor
El proyecto Colegio Montesión nace con el objetivo de ofrecer un entorno educativo adaptado a las exigencias contemporáneas, mediante la reubicación de los alumnos de bachillerato y ciclos formativos desde el histórico conjunto de Montesión en el centro de Palma hacia un nuevo y moderno complejo en Son Moix. Este nuevo centro ha sido diseñado para integrar los más recientes enfoques pedagógicos, priorizando la funcionalidad, sostenibilidad y el bienestar del alumno. A través de soluciones arquitectónicas innovadoras y un enfoque centrado en la flexibilidad de los espacios, el proyecto busca fomentar un ambiente que estimule la interacción, el aprendizaje práctico y el desarrollo personal de los estudiantes.
Tipología
Cultural, educación
Emplazamiento
Palma de Mallorca, ES
Tamaño
6.200 m²
Cliente
Compañia de Jesús
Año
2024
Presupuesto
7.660.700,00 €
Arquitectura
GRAS Reynés Arquitectos
Equipo
Guillermo Reynés, Álvaro Pérez, Elena Gil del Val, Filip Szafalowicz, Laura Purlyte, Klaudia Sandecka, Marta Vracaris
Construcción
Constructora San José SA
Ingeniería
AMM Technical Group
Estructura
AMM Technical Group
Arquitecto Técnico
Juan Capó Puyol
Fotografías
Tomeu Canyellas Moragues
Un espacio educativo integrado y funcional en Son Moix
Este nuevo complejo educativo está diseñado en sintonía con los métodos de enseñanza más innovadores, adaptándose a las necesidades actuales de los alumnos y el personal docente.
El nuevo centro se integra en en la trama existente de pabellones, siendo un pabellón compacto y funcional de 6.200 m² que se sitúa en la parte alta de la parcela, creando un acceso independiente por la calle Andalucía. Esta nueva disposición mejora la conectividad y movilidad del centro, generando un nuevo boulevard flanqueado por zonas verdes que conecta todos los edificios; una rambla de uso interno dónde la vegetación original se complementa con nuevos árboles y zonas ajardinadas, creando espacios de sombra para el verano.
Espacios que promueven el aprendizaje en equipo
El edificio se organiza en cuatro plantas, donde la planta baja funciona como un punto de transición entre el boulevard y las áreas docentes en los niveles superiores. En esta planta se localizan los servicios generales y una cafetería conectada al cuerpo principal por un porche cubierto. La estructura, compuesta por dos volúmenes ligeramente desplazados, alberga una gran escalera de doble altura que facilita la conexión entre las plantas y promueve la interacción entre los usuarios.
Las aulas, situadas en las fachadas para optimizar la luz natural y la ventilación, se diseñan con flexibilidad en mente, permitiendo su agrupación o división según las necesidades del programa educativo. Las zonas de circulación se conciben como espacios de encuentro, fomentando la relación entre los estudiantes y apoyando un modelo de aprendizaje centrado en la práctica y el trabajo en equipo.
Un diseño innovador y eficiente para el confort
Un aspecto clave del diseño es la fachada del edificio, equipada con lamas de acero que responden a las distintas orientaciones del sol, optimizando las condiciones interiores de confort térmico y lumínico. Este enfoque no solo mejora la eficiencia energética, sino que también aporta dinamismo y diversidad visual al edificio.
El complejo ha sido diseñado bajo altos estándares de sostenibilidad, con una cubierta fotovoltaica que cubre las necesidades energéticas del centro, además de incorporar materiales de proximidad que cumplen con exigencias térmicas y acústicas.
El proyecto avanza conforme al cronograma previsto, y con la estructura ya completada, nos acercamos a la creación de un espacio educativo innovador que, una vez finalizado, potenciará un modelo de enseñanza centrado en la experiencia del alumno.