FOREST DEN
Un jardín con una villa para disfrutar de la vida mediterránea al aire libre
Diseño que armoniza naturaleza y arquitectura
Ubicada en la exclusiva zona de Bendinat, esta villa explora la fusión de la arquitectura y la naturaleza. Diseñada para integrarse armoniosamente con el exuberante jardín mediterráneo, la villa se abre tanto a las vistas como al jardín trasero, creando una conexión con el paisaje que enmarca la experiencia de la vivienda. La arquitectura responde a su entorno con sensibilidad, poniendo énfasis en la luz natural, los espacios abiertos y la sostenibilidad.
Tipología
Villa privada, concepto
Emplazamiento
Bendinat, Mallorca, ES
Tamaño
550 m²
Cliente
privado
Año
2021
Presupuesto
1.275.000,00 €
Arquitectura
GRAS Reynés Arquitectos
Equipo
Guillermo Reynés, Álvaro Pérez, Mikolaj Zajda, Lamees Ahmad, Klaudia Sandecka
Infografías
GRAS Reynés Arquitectos
El diálogo entre la intervención arquitectónica y el paisaje preexistente
El proyecto se articula en torno al jardín y a cómo la villa se funde con la vegetación. La parcela es una propiedad en segunda línea en la zona de Bendinat, una zona muy conocida con perfecta orientación sur y la hermosa naturaleza que las rodea. Un barrio que que combina viviendas tradicionales mallorquinas con construcciones modernas.
¿Cómo puede una nueva intervención arquitectónica dialogar con el paisaje ya establecido? Aunque el terreno no se encuentra en primera línea, se beneficia de vistas parciales al mar entre los pinos, las cuales están enmarcadas por el propio jardín. Este jardín es el eje alrededor del cual se organiza la vivienda.
Espacios que conectan el interior con el exterior de forma fluida
La conexión entre el espacio principal de la vivienda y el jardín es la fuerza motriz detrás del diseño. La zona de estar, ubicada en la parte más elevada del terreno, funciona como un “superliving”, abierto tanto a las vistas como al jardín posterior. Un “superliving” se abre directamente al jardín, mientras que el resto de la casa se organiza a lo largo de dos niveles, rodeando este núcleo. La decisión de prescindir de un segundo piso permite que el ‘superliving’ disfrute de una mayor altura libre, una característica poco frecuente en la zona debido a las estrictas regulaciones de volumen y altura.
El salón crea dos terrazas naturales: una en la parte delantera, que se extiende hacia la piscina, y otra en la parte trasera, más recogida. Toda la casa y las terrazas están rodeadas por un exuberante jardín mediterráneo, con elementos tropicales debido al microclima de la zona.
Una distribución que prioriza la funcionalidad y la conexión con el entorno
La distribución de la vivienda sigue este principio fundamental, situando el acceso peatonal y vehicular en el lado oeste para liberar el espacio destinado al jardín. El acceso de vehiculos lleva directamente al sótano, mientras que la entrada peatonal se ubica en la parte superior del terreno, a través de un conjunto monumental de puertas de madera que dan paso a un vestíbulo central organizado alrededor de un árbol en el patio. Este espacio conecta con el sótano y conduce a las diferentes habitaciones de la planta baja, todas ellas con baño en suite, vestidor y vistas al jardín. Una escalera independiente, oculta desde el vestíbulo, y un ascensor dan acceso al dormitorio principal en la primera planta.
Cruzando el patio, se accede al “superliving”, un gran espacio abierto con grandes ventanales correderos a ambos lados. En este espacio sin columnas se ubican la cocina, el comedor y las áreas de estar, con una estructura de hormigón tipo panal que sostiene el gran vano, apoyada en tres puntos extremos, en referencia al trabajo de John Lautner y sus villas californianas. Junto a este espacio, de forma discreta y sin obstruir las vistas, se encuentra la sala de cine. En la primera planta, el gran dormitorio principal con vistas directas al mar y un dormitorio secundario.
La fachada acristalada del dormitorio principal se abre completamente, convirtiéndose en una terraza cubierta. El baño, con bañera y ducha de lluvia, recibe luz natural desde la ventana lateral hacia el techo del ‘superliving’, un techo verde que extiende el jardín hacia el primer nivel.
Las cubiertas se conciben como una extensión del jardín, diseñados como techos verdes con vegetación y paneles solares.
El sótano se concibe como una extensión de las áreas sociales de la vivienda, incorporando espacios como el aparcamiento, las instalaciones técnicas y áreas de servicio como la lavandería y la despensa. Además, se integran un gimnasio, un pequeño spa, una sala de juegos y una bodega, todos ellos con ventanas que permiten la entrada de luz filtrada a través de la piscina. La piscina, revestida con piedra volcánica verdosa, está diseñada como un estanque rodeado de un jardín que se integra plenamente en el paisaje. Reforzando su vínculo con la naturaleza circundante.
El jardín, que constituye el corazón del proyecto, combina elementos mediterráneos y tropicales. Los antiguos pinos existentes proporcionan sombra y protección para la vegetación más baja, mientras que el sistema de reciclaje de agua de la casa se encarga del riego adicional necesario para los elementos tropicales.
Materialidad y estrategias pasivas integradas en el diseño
La distribución del programa en torno al “superliving” genera una composición interesante de volúmenes y forjados, con un uso eficiente del espacio que reduce la escala de la vivienda y favorece su integración con el jardín. Los materiales predominantes son el concreto, el vidrio y la madera reciclada de bambú. El concreto se deja expuesto en las losas, mientras que la madera recubre las partes de la fachada que no están acristaladas. El pavimento interior se compone de piedra natural mallorquina, baldosas y madera.
Soluciones sencillas pero eficaces, tanto en términos de diseño como de eficiencia energética, completan la casa. Las fachadas están revestidas con paneles de aislamiento de alta densidad o vidrio con protección solar, y el impacto del sol se mitiga mediante persianas, aleros de las losas y la vegetación circundante. El agua de lluvia se recoge en el depósito de agua y se reutiliza para el riego del jardín, el llenado de las cisternas de los inodoros y para la piscina.
La ventilación natural y la refrigeración son también esenciales. El “superliving” actúa como un espacio de enfriamiento, donde la brisa fluye de forma natural gracias a la ventilación cruzada, y se ve potenciada por la piscina y el estanque del jardín. Junto con las estrategias pasivas de protección solar y ventilación, se instala una bomba de calor de alto rendimiento con recuperación de calor.