Eleven
Un juego de volúmenes y niveles que transforma la manera de habitar

Espacios que emergen del terreno, redefiniendo la relación entre arquitectura y paisaje
En una de las zonas más privilegiadas de Calviá, Cas Catalá, GRAS Reynés Arquitectos ha culminado el proyecto de un edificio de cuatro plantas que alberga siete viviendas plurifamiliares. El diseño responde a las características del terreno, que tiene una pendiente y una orientación norte-sur, optimizando la luz natural. La edificación se integra de manera armónica con el paisaje, garantizando la privacidad y funcionalidad de los espacios.
Tipología
Residencial
Emplazamiento
Cas Català, Mallorca, ES
Tamaño
2.500m²
Viviendas
7
Cliente
Domus Vivendi Group
Año
2023
Presupuesto
2.500.000,00 €
Arquitectura
GRAS Reynés Arquitectos
Equipo
Guillermo Reynés, Marco García, Ainhoa Tapia
Ingeniería
Ingenio Ingeniería
Ingeniero Técnico
Jaume Rosselló Alomar
Construcción
OBRAS Y CONSTRUCCIONES PEDRO SILES, S.L.
Fotografías
Tomeu Canyellas Moragues

Arquitectura que se despliega en plataformas, abrazando la forma del terreno
El proyecto se emplaza en una parcela con forma trapezoidal, en pendiente y con orientación norte-sur, lo que permitió la creación de una edificación distribuida en diferentes plataformas. La disposición de los niveles toma como base la edificación anterior, que ya estaba adaptada a la pendiente, favoreciendo así una integración natural con el terreno. Esto permite una distribución uniforme de la luz natural en toda la parcela, logrando una conexión constante con el entorno.


Distribución funcional de las viviendas
El edificio está distribuido en cuatro plantas: dos viviendas en la planta baja, dos en la primera, dos en la segunda y un ático o pent-house con acceso a la cubierta en la tercera planta. Las viviendas de la planta baja tienen terrazas privadas que se conectan directamente desde el interior, junto con un patio trasero privado.
En el primer y segundo nivel del edificio, la fachada refleja dinamismo a través de volúmenes que crean amplias terrazas orientadas al este y al sur, maximizando la luz natural y la orientación del terreno. Estos dos niveles albergan las otras cuatro viviendas, dos en cada planta.

Por último, el ático se distingue por su flexibilidad espacial y distribución fluida, ampliando las posibilidades de relación entre los espacios. Su acceso directo a la cubierta refuerza la conexión con el entorno exterior y ofrece vistas excepcionales.

Privacidad, vegetación y espacios comunes como ejes de convivencia
La vegetación existente se limita a los laterales de las viviendas, tanto en los lados como en la parte trasera, creando un filtro visual con los vecinos cercanos. Esto permite que los residentes disfruten de un espacio de intimidad sin perder la relación con el paisaje. Las zonas comunes del edificio incluyen jardines, piscina y terrazas privadas, además de un acceso adaptado para personas con movilidad reducida desde el sótano.



